El Corredor de la Sierra Huasteca es una ruta de aventura y para estar en contacto con la naturaleza. Se pueden hacer diversas actividades, deportes extremos, conocer la auténtica gastronomía hidalguense y artesanía llena de encanto.
Desde la CDMX debes tomar la carretera a Pachuca. Pasando la capital Hidalguense, debes seguir el camino hacia Tampico donde comenzarán los paisajes boscosos del Corredor Sierra Huasteca, pasando por Omitlán, un lugar de hermosas huertas de manzanos. A casi 30 kilómetros de Pachuca, comienza la ruta:
Atotonilco el Grande “en las aguas termales”.
Nombre gracias a los baños termales que existen en el Municipio. Su mejor joya, el templo bajo la orden de Fray Juan de Sevilla entre 1542 y 1562, siendo el primero realizado en tierras otomíes. Al interior, sus capillas laterales y su claustro anexo con pintura mural relacionada a la Pasión de Cristo. También puedes hacer un paseo en lancha por el lago El Comalillo o conocer las leyendas en el Puente de Dios.
Siguiendo la ruta por 14 kilómetros llegamos a:
Metztitlán “lugar de la luna”.
Un pueblo enclavado en el fondo de la barranca del mismo nombre, junto a una laguna y con rincones como el ex convento Los Santos Reyes, construido por los misioneros y evangelizadores de dicha orden en el siglo XVI. Visita el jardín botánico ubicado en la Reserva de la Biosfera Barranca de Metztitlán.
Continuamos nuestro camino por 35 kilómetros y llegamos a:
San Agustín Metzquititlán “lugar de mezquites”.
Admira bellos paisajes naturales repletos de cactáceas endémicas mientras pruebas deliciosos platillos de la región como los tamales de chala, de mole, salsa verde, chala con frijol y rajas. Palanquetas de nuez, de cacahuate y de azúcar, jamoncillo de pepita, piñón, nuez, café y rompope.
A 22 kilómetros, llegamos a uno de los principales municipios del Estado:
Zacualtipán de los Ángeles “lugar de escondites”.
Visita el Templo Agustino dedicado a Jesús Nazareno; la Casa de Piedra labrada en una roca de gran tamaño por un prófugo de la justicia a principios de siglo XVIII; el Templo Parroquial Santa María de la Encarnación que su construcción que data de 1734.
Tlahuelompa o San Francisco Tlahuelompa “lugar muy allá”.
Población de un poco más de mil habitantes y a 30 minutos sierra adentro desde Zacualtipán, se encuentra este poblado famoso por la elaboración de vinos de frutas (zarzamora, limón, naranja, guayaba, manzana, etc.) elaborados artesanalmente. Los más famosos son “Licores Fontana”. En sus talleres puedes hacer degustación del licor que ahí se fabrica, conociendo todo el proceso de elaboración. No hay hoteles en Tlahuelompa, por lo que tendrás que ir a Zacualtipán.
Tizapán
Pasando Tlahuelompa y a unos 20 minutos en camino de terracería, Tizapán es conocido por la fabricación de campanas, santos y artículos religiosos desde hace ya más de 100 años. Podrás encontrar talleres de fundición de campanas o de artículos de exportación a base de cobre, latón o bronce, además de unos increíbles paisajes de la Sierra Hidalguense. Tampoco hay hoteles en Tizapán.
Regresando a la carretera hacia Tampico, seguimos la ruta y la desviación a:
Tianguistengo “en orillas del mercado”
A tan solo 30 minutos desde Zacualtipán, en una carretera de 15 kilómetros la cual tiene casi 100 curvas, se encuentra la cabecera municipal Tianguistengo. Poblado dentro de la sierra madre, con un promedio de 18° de temperatura en un clima templado-húmedo. Llegando se puede sentir la tranquilidad en sus portales y ventanas adornadas con cortinas de papel de china. Su iglesia, un importante monumento, construida en el año de 1540 dedicada a Santa Ana, siendo el 26 de julio la máxima fiesta para celebrar a las Santa Patrona. Mañanitas, cohetes y repique de campanas, confirmaciones, bautizos y procesión acompañada por banda de música de viento; por la noche fuegos artificiales y baile popular.
Otra de las fiestas importantes es la de Semana Santa, ya que en esta festividad se recuerda la muerte de Jesucristo, se inicia en domingo de ramos día en que la gente lleva a la iglesia a bendecir ramos de palma, de flores (manzanilla, romero, etc.), para continuar con los días santos lunes, martes, miércoles, jueves; el día viernes Santo, con un recorrido acostumbrado en el lugar conocido como “La Estación”. Una procesión en donde se lleva a cabo la dramatización en vivo por lo fariseos o romanos quienes hacen todo el simulacro de semana santa. Como complemento hay torneo de gallos, baile y finaliza el domingo de resurrección con la quema del judas y fuegos artificiales.
Si deseas un hermoso recuerdo de la sierra, Las Cruces de Tlachaloya es el lugar ideal para hacer esa impresionante toma.
No dejes de tomar el “axocol” bebida refrescante a base de nixtamal y piloncillo. Además del famoso pan como tortas rellenas de queso, apasteladas, frutas de horno, cemitas, pan blanco, volcanes, roscas, coronas, marquezote y pan de muerto.
Regresando a la carretera hacia Tampico y a 33 kilómetros desde Zacualtipán, Hidalgo llegamos a:
Molango de Escamilla “lugar de mole”.
Podrás visitar el ex convento y parroquia de Nuestra Señora de Loreto, con una extraordinaria fechada plateresca, además de conocer de cerca la historia de este poblado recorriendo sus callejuelas. Un lugar ideal para practicar senderismo, campismo, nado y pesca en la laguna Atezca.
A 85 kilómetros, llegamos a nuestra última parada:
Huejutla de Reyes “lugar donde abundan los sauces”.
Conocida como la perla Huasteca, con un clima caluroso y abundantes lluvias, Huejutla de Reyes es el centro comercial agrícola, cultural y social de la Huasteca hidalguense. Lugar ideal para probar los más exquisitos manjares ofrecidos por la huasteca como la tradicional cecina, bocoles, enchiladas y zacahuil. Puedes visitar el Ex Convento de San Agustín, la Catedral de Cristo Rey (construida en el siglo XVI por frailes agustinos, cuenta con la denominación de Monumento Nacional) o el reloj municipal (construido en 1908 con motivo del primer centenario de la Independencia de México) ubicado sobre una torre de piedra volcánica.
El día de muertos, Huejutla vive el Xantolo al estilo huasteco. Lugar ideal para el ecoturismo en La Mesa de Limantitla con cabañas, palapas, restaurantes y una alberca de casi 2 metros de profundidad.
